Nica La Goda

Desde que Christina Manuela entro al colegio nuevo todas las semanas hay un compromiso social (piñatas), es impresionante lo agitada que tienen las agendas los chamos hoy día. En fin tenia que llevar un regalo hoy al colegio y a su mami estrella se le olvido. Salí con ese clima impertinente y pedante con el que amaneció Caracas hoy, la verdad es que no me gusta, me deprimo, recuerdo mi tierra, calentita y con brisa. En la radio, para colmo, comenzó a sonar Destinos Musicales, Eli Bravo hablaba de madamas y carnaval, y a mi el corazón se me arrugaba mas, menciono a la mítica Negra Isidora y a Lulu Basanta, para ser sincera mientras vivía en Upata el calipso ni me iba, ni me venia; pero desde que vine a vivir a Caracas se convirtió en símbolo de mi nostalgia. Eli Bravo continuo con su programa y como es costumbre al final hizo sonaruna cancion, Isidora it’s Callao calipso queen, seguí manejando, esa lluvia persistente se negaba a cesar y mis lagrimitas, sin saber de donde, ni como salieron a flote.
Mi vida en Caracas es otra, ahora tengo mi propia familia, a la que atender. Mi viaje para acá que era en un principio un paréntesis para estudiar, con el tiempo y sin darme cuenta como, se convirtió en punto y a parte, ahora vivo en un constante intento de que no se convierta en punto y final y a otra historia.

Escribo estas líneas con la esperanza de que alguien las lea, y comprenda la posición, que tengo la certeza, es de muchos de nosotros los venezolanos, que estamos en oposición. Siendo como somos, nacidos, criados y educados en esta tierra; con un orgullo exagerado, pero que a final de cuentas todos llevamos dentro.

Nací aquí en Venezuela, mi hija es venezolana, soy de una familia guayanesa, con mas de 5 generaciones, equivalentes a 125 años, instalados y arraigados en esta tierra que no nos ha negado nada, hemos trabajado y criado a nuestros hijos y no nos vamos a otro país, por que aquí están nuestras raíces.
Por estas razones, que son mas que suficientes, me indigno profundamente cada vez que escucho, que por no apoyar un gobierno, que todos sabemos que ha significado para Venezuela, no soy venezolana.

Cada vez que sintonizo VTV, Vive TV, ANTV y Tele Sur, siento que estoy siendo excluida del único sitio al que realmente pertenezco; siento que estoy siendo deslegitimada, junto a una gran parte de la población.
Para ser venezolano no tenemos que ser chavistas o de oposicion, para ser venezolano no tenemos que apoyar o no a alguien, no tenemos que vender los ideales y menos el alma, para ser venezolano lo único que necesitamos es haber nacido en Venezuela.

Leer, que significa leer? Según quien? Por que leer tiene un significado particular para cada persona. Pero para mi leer es sumergirse en mundos paralelos, a veces mundos desconocidos y otras veces conocidos. Leer es dejarme llevar de la mano de alguien que apenas conozco, de no ser por las reseñas bibliograficas, a lugares, situaciones, escenas.
Leer es intentar vivir con cada personaje momentos que no me pertenecen, pero que vivo en los zapatos de cada uno de ellos.
Leer para mí se ha convertido en una especie de vicio, de necesidad por saber más, por sentir más. Todo esto comenzó a los 6 años con un librito que se llama Mi Jardín, comenzó entre vocales y el inevitable m con a ma, cuando finalmente lo aprendí y comprendí no deje a nadie en paz hasta aprender todas esas lecciones, por que mi meta era llegar a las ultimas, que eran ya textos. A partir de ese momento no hubo libro para niños que una orgullosa madre veinteañera no me comprara, solo por el gusto de ver a su primera hija leyendo vorazmente cuentos que las niñas de mi edad no leían ni leyeron nunca.
Leer me hizo una adolescente un poco atípica, siempre preferí estar en mi cuarto con algún libro que andar en fiestas, fui como una especie de bichito raro al que el lunes nadie le preguntaba que había hecho por que la respuesta no era diferente a la de los lunes anteriores. Las Mil y Una Noches fue mi fascinación durante esa etapa, también llego a mis manos el genial Edgar Allan Poe, El Amor en los tiempos del cólera y Cien años de Soledad del Gabo.
Leer para mi se ha convertido en un eterna búsqueda de algo mejor, en una fascinación por cada obra, he leído libros que realmente dejan mucho que desear de mis gustos, pero que me han atrapado de tal manera que hasta que no supe el final no estuve quieta, solo existe un libro que no he terminado y es por que se me ha hecho denso y complejo, Rayuela, de Julio Cortazar, por lo que se esta convirtiendo en una especie de obsesión.
Con el tiempo leer se convirtió en una prisma, en un habito que me brindo un estilo y manera de ver la vida.

Conozco a una persona que describe dos tipos de ocio: el ocio burgués y el ocio marginal, soy muy preguntona, es como una verborrea, no lo puedo evitar, así que no me aguanté y pregunte qué era eso, por respuesta obtuve dos ejemplos: el del ocio burgués resultó ser alguien que se había dedicado a leer y estudiar sobre guerras, su única motivación es que le gusta, no es obligatorio, pero le gusta, su mente ociosa se adentró de tal forma que termino creyendo que todos conspiraban en su contra, su esposa, su madre y hermana eran las principales, cuando andaba sin nada en que pensar, comenzaba a desarticular esas conspiraciones familiares, les cuento que es el único hombre en una familia de cuaimas locas, que arman unos chismes horribles y liquidan moralmente a cualquier intrusa “somos las que estamos y estamos las que somos” así dicen.
Luego vino el ocio marginal, es un caso bastante triste, se trata de un hombre que nunca se dedicó a nada, es en serio, no hizo absolutamente nada con su vida, tuvo unas hijas que se criaron silvestres y llevan vida silvestre, llegó a estados críticos, no quiero decir nada que asquee, pero su higiene personal dejaba mucho que desear, ese es el definido ocioso marginal.
Esta persona que me dio esta extraña definición no es otra que la ociosa de mi mama, que no se como hace, siendo profesora en tres colegios, llevando una casa de manera eficiente, todavía se le ocurre semajentes ridiculeces, así que se me ocurrió una definición para ella: ociosa natural, es que no se le ocurre nada bueno, hubo un tiempo que se dedicó a nosotros por completo, no trabajó, dejó los estudios y nos crió, yo estudiaba en el turno de la tarde, así que en varias ocasiones vi como a las 11:00 a.m. que la cuadra quedaba sola, venia corriendo con una vecina cuadra abajo, porque habían quemado basura en medio de una acera y la candela casi incendia una de las casas, otra vez las vi con unas matas, cuando les pregunté me dijeron que las pobres se estaban secando en una casa abandonada, que estaban huérfanas de cariño y ellas acababan de adoptar a las pobres moribundas, la verdad es que le voy a preguntar: que clase de ocio es el que mejor te define? Lo mas seguro es que reciba una insultona, pero me voy a arriesgar solo para escuchar esa lengua ociosa hacer de las de ella.

Desde mi casa tengo una vista bastante privilegiada, se ven techos y sobresalen edificios, Parque Central, el contraste entre dos torres; una con apariencia integra y otra abatida por el fuego, techos invadidos de publicidad, una inmensa taza de café roja de Nescafe y una bola bicolor de Pepsi Cola son las que mas resaltan, el valle, un inmenso cerco de montanas que rodean una ciudad que intenta ser cosmopolita. Se aprecia el contraste entre el verde y ese color concreto frío, como a medida que la ciudad se acerca las nubes toman un color menos azul, menos claro.
De noche parece un cielo estrellado, se ve todo oscuro y luces alumbran como luciérnagas, sin ninguna forma aparente, pero no son más que edificios y casas, por lo que si juegas a unir los puntos de seguro se descubre la forma de alguna de las torres de Plaza Venezuela.
Tanto en la claridad como en la oscuridad, la vista hacia Coche resulta asombrosa; de día por la impresión de poco espacio, no se si es color rojo de los ladrillos, pero estoy segura que allí no es el espacio lo que abunda; de noche, parece una escena navideña la cantidad de luces, unas muy cerca de otras o todas muy cerca todas.
Sentada en el mismo sitio y sin ver tan allá, tan lejos, veo el parque de mi edificio, columpios multicolores, un tobogán alto para una niña de 4 años, una rueda, subibajas, era un sitio divertido para Christina pero por un altercado de niños decidió no bajar más, por lo que ese parque perdió mi interés, aunque no deja de parecerme agradable y divertido.

Hace unos días iba caminando por Altamira, de ida iba pensando que extrañamente me gusta caminar por es avenida, primero esta el CELARG, luego la CAF, hay un café bastante agradable en la esquina, llegué a mi destino y mis divagaciones quedaron pendientes, cuando venia de vuelta hice la misma ruta pero no había llegado a la esquina del café agradable y veo que el ambiente no es el mismo, carros aglutinados, cornetazos, motos de la Policía de Chacao, en fin una merienda de negros, decido acercarme para averiguar, y Sorpresa! El café lo cerró la Alcaldía de Chacao, y todo el personal estaba en la calle, gritando consignas: queremos trabajar! No somos delincuentes! La verdad me dio risa la situación, así que decidí acercarme al perrocalentero de la esquina a chismear y así aprovechaba y me comía alguito, ojo, eso por que me parece que por lo menos ese municipio no apesta, bueno me contó el senor que cerraron por que hacían mucho ruido y en la clínica que queda al lado se quejaron, entonces me pregunto: si una alcaldía cumple con su trabajo, vela por el bienestar de sus residentes la gente se queja, sale a protestar, tranca el tráfico y le amarga el almuerzo a los pobres que andan por allí y si no lo cumple somos felices?
El Valle de Santiago de León de Caracas, probablemente deje de llamarse así dentro de poco, un caprichoso alcalde ahora le dio por que no quiere celebrar fechas de conquistadores, pero se niega a entender que por cambiarle el nombre a la ciudad no va a tener una nueva, será que la basura va a desaparecer junto con el emblemático león? No, a lo mejor cree que si es Guiacaipuro el nuevo emblema, la gente va a cambiar, va a ser mas solidaria, mito por demás ridículo en esta sociedad, y se demuestra a diario, por que son contados los vehículos que le dan el paso a la viejita que viene del mercado, por que nadie recoge lo que su adorado perrito hace, y hay de ti si les reclamas, los muy descarados se ofenden como si el error es del que se queja.
Veo como el gentilicio caraqueño no ha perdido el orgullo, todavía decimos Caracas es Caracas, lo demás es monte y culebra, pero parece que no nos damos cuenta del mal olor en la calle, de la falta de respeto a la que somos sometidos a diario entre nosotros mismos, de que es matemáticamente imposible llegar a tiempo y de buen humor, es que entre la cola y la cantidad de improperios que oímos y decimos a diario a casi nadie le queda rastros de sonrisa alguna, y la cantidad de indigentes niños, adultos y ancianos terminan por deprimirnos.
La Esfera de Soto se la llevaron, nadie vio como, menos mal que se dignaron a reconstruirla, aunque Jesús Soto no es afecto a estos fulanos; la Fisicromia de Cruz Diez tiene ahora un artístico “Muy pronto recuperara su esplendor”, al pobre de Colon que solo andaba buscando una ruta alterna para La India, lo decapitaron en Plaza Venezuela.
Mientras Caracas se queda sin nada agradable que ver cuando vamos en la interminable cola, mientras a Caracas se la come la basura, mientras Caracas cada vez huele peor, nos queda una gran satisfacción, le van a cambiar el nombre, y como dije antes, vamos a dejar de celebrar fechas de conquistadores, Bravo! Quiza nos vaya mejor llamando a la ciudad San Juan Barreto de Guaicaipuro!